jueves, 17 de mayo de 2007

Visita a un hospital cubano

Hoy como parte de una actividad por el aniversario de la muerte de José Martí, visité un hospital de niños. El hospital se llamaba Aballí y se encuentra en el municipio Arroyo Naranjo de Ciudad Habana. Me sensibilicé muchísimo, porque es increíble ver como los niños aún con enfermedades de salud propias de la niñez y del clima tropical, conservan su sonrisa, su andar de aquí para allá con pasos suaves-firmes. Me sentí un hombre puro, digno al verme sensibilizado con la causa de los niños enfermos. De verdad que es bonito ayudar a la gente que más necesita y en especial si son niños enfermos. Le llevamos libros y algunos jueguetes para los niños que se encuentran un poquito peor. Eso es único en el mundo, el poder ver como los jóvenes universitarios se sensibilizan con los niños y lo digo por mi y por los demás que estaban allí que sintieron lo mismo que yo, el corazón puro. Hoy no escribo más, pero tengo la esperanza que me dejen algún mensaje o algún comentario. Soy un hombre PURO y LIMPIO, pues he echo una buena acción.

No hay comentarios: